Título original: Paths of Glory
Director: Stanley Kubrick
Guión: Stanley Kubrick, Calder Willimgham, Jim Thompson
Música: Geradl Fried
País y año: USA, 1957
Duración: 97 min.
Intérpretes: Kirk Douglas, George MacReady, Adolphe Menjou, Ralph Meeker, Wayne Morris, Joe Turkel, Richard Anderson
Director: Stanley Kubrick
Guión: Stanley Kubrick, Calder Willimgham, Jim Thompson
Música: Geradl Fried
País y año: USA, 1957
Duración: 97 min.
Intérpretes: Kirk Douglas, George MacReady, Adolphe Menjou, Ralph Meeker, Wayne Morris, Joe Turkel, Richard Anderson
En este mes de junio, tiene lugar el centenario del atentado de
Sarajevo, hecho que propició el inicio de la Primera Guerra Mundial
(1914-1918). Entre la filmografía sobre la Gran Guerra, una de las películas
que podemos escoger es Senderos de gloria,
de Stanley Kubrick.
Esta obra constituye uno de los mayores alegatos pacifistas, y en parte
está inspirada en hechos reales. Fue aquella Gran Guerra una guerra de
trincheras y ataques suicidas, en los que los soldados caían masivamente ante
las metralletas enemigas y que muchas veces terminaban en fracaso. Antes estas
auténticas carnicerías humanas sin sentido, donde morían miles de personas, se
dieron casos de lógicas insubordinaciones, que fueron castigadas como traición
o cobardía.
En la Primera Guerra Mundial, muchas veces la ambición personal de los
generales llevó a espantosos fracasos, en los que quienes verdaderamente
tuvieron las de perder fueron los miles de soldados que murieron en el frente.
Esto se narra en la película que nos concierne, en la que un consejo de guerra
(ante uno de estos fracasos) juzga por cobardía a unos inocentes soldados.
Sin duda, hay que destacar las interpretación de Douglas como el coronel
Dax y Adolphe Menjou como el general Broulard, así como la contraposición entre
las trincheras donde malviven los soldados, y los salones palaciegos donde
están los generales.